Océanos, el recurso decisivo en la salud del planeta

Naciones Unidas instituyó el 8 de junio como el "Día internacional de los Océanos" con el fin de recordar la importancia de éstos en el desarrollo de la vida. En 2022 el tema es: "Revitalización: acción colectiva por los océanos".

8 de junio de 2022

Naciones Unidas instituyó el 8 de junio como el "Día internacional de los Océanos" con el fin de recordar la importancia de éstos en el desarrollo de la vida. En 2022 el tema es: "Revitalización: acción colectiva por los océanos". Como describen en la página web el propósito de este día "es informar sobre el impacto de los humanos en el océano, desarrollar un movimiento mundial de apoyo y unir a la población en un proyecto para la gestión sostenible de nuestros mares".

Este año se "ensalzará las maravillas del océano como fuente de vida que apoya a la humanidad y a todos los demás organismos de la Tierra." Además del 27 de junio al 1 de julio se desarrollará la Conferencia sobre los océanos, en Lisboa, Portugal.

La decisión de establecer este día se basa en que los océanos son el factor decisivo en la salud del planeta y en la creación de conciencia sobre la acción humana. Estas enormes masas de agua, que cubren tres cuartas partes del planeta, producen el 50% de oxígeno del mundo, siendo una parte fundamental de la biosfera. Los océanos absorben el 30% del dióxido de carbono producido por humanos, amortiguando los efectos del calentamiento global.

El informe de UNESCO de 2021 advierte que sin una protección adecuada de los océanos este papel fundamental en el control del clima podría verse disminuido en el futuro.

¿Qué afecta a la función de los océanos?

La quema de combustibles fósiles: sube los niveles del efecto invernadero en la atmósfera, produciendo la acidificación en el agua de los océanos, es decir que afecta su composición química.

Los gases de efecto invernadero: elevan las temperaturas de las aguas, y en conjunto con el cambio de vientos, se producen modificaciones en las corrientes oceánicas.

El derretimiento de glaciares: provocan que los océanos se calienten aún más, y aumenten su nivel.

La contaminación producida por humanos: alrededor de 8 millones de toneladas de plástico por año terminan en el océano. Según una investigación publicada por Science Advances, "el 80% de los residuos plásticos se distribuyen entre más de 1.000 ríos".

Desalinización de agua de mar: produce según la ONU que "más del 80% de aguas residuales resultantes de actividades humanas se viertan en los ríos o el mar sin ningún tratamiento", provocando más contaminación.

Sin dudas la acción del ser humano más el cambio climático, representan un peligro para la salud de los océanos, y la consecuencia sobre el planeta.

¿Qué hacer?

La agenda 2030 busca mejorar la calidad del agua. Para ello debe reducirse la contaminación, eliminando el vertimiento y llevando al mínimo los productos químicos y materiales peligrosos. Con esto se "reduciría a la mitad el porcentaje de aguas residuales sin tratar".

La página oficial de la Conferencia sobre los Océanos, de 2022, asegura: "Los océanos se enfrentan a amenazas sin precedentes como resultado de las actividades humanas. Su salud y capacidad para preservar la vida solo empeorará a medida que la población mundial crezca y las actividades humanas aumentan. Si queremos abordar algunos de los problemas más significativos de nuestra época, como el cambio climático, la inseguridad alimentaria, las enfermedades y pandemias, la pérdida de biodiversidad, la desigualdad económica e incluso los conflictos y contiendas, debemos actuar ya para proteger el estado de nuestros océanos"

Actualmente:

Naciones Unidas especifica que "el 90% de las grandes especies marítimas de peces han mermado, y el 50% de los arrecifes de coral están destruidos", "se extrae más de lo que se puede reponer". Por ello promueven la búsqueda de un nuevo equilibrio.

Los océanos representan el 97% de agua del planeta, y contienen 200.000 especies identificadas, y se estima que serían millones

Más de 3 mil millones de personas dependen de la biodiversidad marina y costera como sustento. Su valor representa el 5% del PBI mundial.

Los niveles de acidez aumentaron 26% desde el inicio de la Revolución Industrial.

Por todo esto se lleva a cabo la acción por la concientización y difusión de información sobre el cuidado de los océanos, ya que éstos "impulsan los sistemas mundiales que hacen de la Tierra un lugar habitable para el ser humano".

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