Política
El gobernador, Axel Kicillof, gana presencia en los distritos para exponer la gestión. Grindetti apuesta por un eje basado en seguridad y educación, mientras que Píparo se adhiere a Milei y busca correr a JxC de la discusión
Por: Bruno Lazzaro
23 de septiembre de 2023
Cuando ya falta menos de un mes para las elecciones que definirán el destino de los bonaerenses para los próximos cuatro años, los candidatos decidieron salir a jugar todas las fichas juntas con el fin de poder tomar el control de la narrativa.
El objetivo de los aspirantes a sentarse en el sillón de Dardo Rocha es salir a presionar fuerte sobre los temas que, según la lectura de cada uno, son los que afectan el cotidiano de los vecinos de la Provincia.
Y, como era de esperar, los desafíos difieren. El gobernador Axel Kicillof tiene claro que para revalidar su mandato y lograr la reelección necesita de la mayor territorialidad posible. No solo para poder dar evidencia de lo realizado sino también para acoplarse a los intendentes, quienes en las PASO demostraron ser los más aptos para retener, fidelizar y contagiar el voto.
Es por esto que el
mandatario provincial ajustó la agenda para tratar de llegar a la mayor
cantidad de distritos, pero no solo donde Unión por la Patria es gobierno.
Kicillof sabe que necesita también empujar a los candidatos sin tierra, sobre
todo en los distritos más populosos.
En tan solo tres días, pasó
por distritos de la segunda, tercera, quinta y octava sección rumbo a lo que
será el acto que se llevará a cabo el miércoles 27 de septiembre en el estadio
de Defensores de Cambaceres, en Ensenada, con una fuerte movilización en su
favor y también de la fórmula presidencial que encabeza Sergio Massa.
El encuentro contará con la presencia de los jefes comunales. "Es con todos. No hay otra lectura. Si alguno piensa que le conviene jugar la personal, habrá que preguntarles qué van a hacer si les toca compartir el gobierno con Milei o con Grindetti en la Provincia", le dice a El Editor, uno de los dirigentes kirchneristas detrás de la organización del evento.
En el camino al 22 de octubre, la clave pasa por conseguir bajar la distancia que hubo en las PASO entre el voto a gobernador y a jefe comunal en algunos distritos. "No hay margen para otra cosa, la boleta tiene que ir entera. Después no podemos excusarnos", agrega la misma fuente.
De ahí lo importancia de
los armadores seccionales. El ministro de Infraestructura bonaerense, Leonardo
Nardini, el diputado del Frente Renovador, Rubén Eslaiman, el presidente del
Grupo Provincia, Gustavo Menéndez, y el ministro de Obras Públicas de la
Nación, Gabriel Katopodis, son quienes comandan en la primera.
Mientras que en la tercera, todo corre por cuenta del jefe de Gabinete bonaerense, Martín Insaurralde, el jefe comunal de Avellaneda, Jorge Ferraresi, y el diputado nacional Julio César Pereyra. Todos apuestan a lo mismo: sostener.
El gobernador sigue atento
los números que exponen las encuestas. Y siente que la caída de Patricia
Bullrich podría ser perjudicial si ese voto se fuga en favor de Javier Milei, algo que
terminaría por favorecer a la representante provincial de La Libertad Avanza,
Carolina Píparo.
Es por eso que Kicillof
mandó a poner en el centro de la discusión a Grindetti. Y quedó en claro tras
la confrontación que tuvo el jefe de Asesores, Carlos Bianco, con el aspirante
PRO por el rol de su área.
Incluso, el gobernador
aprovecha cada uno de sus actos de presentación o inauguración en los distritos
para contestar lo expresado por los referentes de ambos bandos. "No es parte de
una estrategia. Hay cosas que no se pueden dejar pasar. La apuesta del
gobernador pasa por mostrar todo lo que se hizo y todo lo que se está haciendo
y cómo le vamos a dar continuidad a un montón de políticas que cambiaron la
vida de la gente. Sin vouchers y con estado presente", confía una fuente del
ejecutivo provincial.
El movimiento opositor
Néstor Grindetti sabe que las cuentas para poder dar la pelea local están supeditadas a lo que pueda hacer Patricia Bullrich a nivel nacional. Fue a través de ella que logró ganar la pulseada contra Diego Santilli y también tiene claro que, si se desinfla el globo, la caída es inevitable.
Es por esto que el aspirante provincial tomó la decisión de ponerse al frente de la campaña bonaerense ya sin la obligación de mencionar su ligazón directa con la exministra de Seguridad de la Nación durante el gobierno de Mauricio Macri.
Su último spot lo expone.
Ya no es lo que manda Bullrich, sino la necesidad de dejar a la vista las
diferentes problemáticas bonaerenses. El jefe comunal de Lanús, con pedido de licencia,
puso el foco en la inseguridad y entre sus propuestas no maquilló una ideología
cercana a la "mano dura", con el planteo en favor de bajar la edad de
imputabilidad y de reequipar a las fuerzas de seguridad con armas no letales.
Grindetti también aprovechará lo que queda del camino rumbo a octubre para instalar un mensaje anti sindical con la "zanahoria" de los 190 días de clases como parte del plan de educación. "El estado tiene que volver a recuperar el control", manifestó en su momento. Y agregó, en un intento de mostrarse como una opción del medio: "Ni privatizar, ni ser rehenes de Baradel".
Ya con la mira puesta en no perder votos ante la avanzada de Píparo, Grindetti también apelará a una serie de medidas para bajar el gasto público y restaurar el sistema impositivo. Para esto, la propuesta gira en torno a bajar los cargos y estructuras políticas y eliminar hasta 2 mil regulaciones y trámites administrativos para favorecer al sector privado, además de analizar una reestructuración del sistema impositivo para quitarle presión al sector productivo, en especial al campo.
Por su parte, Píparo sigue firme en su intención de pegarse lo más posible a Milei. En los últimos días se la vio a la par del líder del partido en la caravana de la motosierra con la que recorrieron La Matanza, La Plata y Bahía Blanca, tres puntos clave en el conteo de votos para los libertarios. Los dos primeros por su tracción electoral, mientras que el distrito del sur es el único refugio provincial donde La Libertad Avanza tiene chances concretas de quedarse con la intendencia.
La diputada nacional quiere confrontar directo con el gobernador y, cada vez que puede, le baja el precio a Juntos por el Cambio. Incluso llegó a mencionar que, de haber un balotaje en la Nación, sería entre Milei y Massa.
Píparo se adhiere como
puede a su compañero de banca en la Cámara baja del Congreso de la Nación. Su
oportunidad está ligada cien por ciento al empuje del líder del espacio. Su
aporte está relacionado en lo que parece ser su especialidad: la seguridad.
¿Su solución para la
problemática? Al igual que Grindetti, la mano dura. "La provincia de Buenos
Aires viene todos los días la misma historia: los delincuentes actúan con total
impunidad porque no hay decisión política para terminar con la inseguridad.
Hace dos días sucedió en La Tablada, pasó con Morena en Lanús, con una jubilada
en La Plata, violentada por menores. Los bonaerenses no pueden más".
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Cerca de una decena de legisladores podría abandonar la bancada amarilla y sumarse a LLA o armar un bloque apéndice del oficialismo.