Una operación política para tapar la falta de gestión. La utilización política de la tragedia. La muerte de una nena de 11 años no aplacó el modus operandi de Diego Kravetz, el hombre a cargo de al seguridad en Lanús. La farsa choca contra la realidad.

"Acá se vende droga por todos lados. Los patrulleros pasan por la puerta de los tranzas y siguen de largo. Esto es tierra de nadie, estamos solos". El que habla es Maxi, un trabajador del reciclado que vive en el barrio Eva Perón, en Villa Caraza, Lanús, casi en el límite del riachuelo que separa al conurbano de la zona sur de la capital. Es el mismo barrio donde velaron a Morena Domínguez, de 11 años que murió asesinada durante un robo cuando iba camino al colegio. Maxi conoce desde años al papá de la nena, Hugo: ambos entrenaban juntos al equipo de fútbol de sus hijos varones y en algún momento de sus vidas fueron compañeros en una cooperativa del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE). Por eso, cuando dice que siente que pudo tocarle a él, no suena impostado: habla con el tono grave de los que están desesperados.

"Los que vivimos en los barrios de esta zona somos casi todos cartoneros. Cuando los ves juntando cartones en Palermo, la gran mayoría somos los de por acá, o de Fiorito. Somos un barrio de laburantes, que nos empezamos a organizar a partir del 2001. No tenemos luz, estamos colgados, ni gas. El agua la tenemos que traer de otro lado, tampoco tenemos cloacas. Lo que nos pasa ahora, con esta situación que es producto de años de abandono, es que nos dejaron solos con el narco, que anda por todos lados. No se hace cargo nadie, y es una plaga", describe.

Reclamo de justicia frente a la comisaría de Lanús. Foto: Telam.

Lanús, precisamente, terminó convirtiéndose en el kilómetro final de la campaña electoral. El asesinato de Morena, víctima de una banda que se dedicaba a hurtos pequeños, más bien rastreros, y con problemas de consumo (fueron capturados en la Zavaleta, Ciudad de Buenos Aires, mientras intercambiaban el celular robado a la víctima por droga), implosionó la agenda política y obligó a todos los partidos y candidatos, nacionales y provinciales, a suspender sus actos de cierre de cara a las PASO. Una suerte de luto obligado empañó los discursos al filo de la elección y todo volvió a girar sobre dos ejes: la inseguridad y la muerte.

El municipio que se llegó durante esta semana al tope de la agenda informativa es clave: concentra unos 380 mil electores habilitados para votar (más que las provincias de La Rioja, Catamarca, La Pampa, Formosa y Santa Cruz, por caso) y su intendente en licencia, Néstor Grindetti, un histórico dirigente del macrismo, es el candidato a gobernador de Patricia Bullrich, que este domingo se juega mucho más que una interna frente a Horacio Rodríguez Larreta al interior de Juntos por el Cambio. La base de la campaña de Grindetti y Bullrich es, precisamente, el combate de la inseguridad. Además, quien quedó a cargo de la gestión municipal de forma interina es Diego Kravetz, exsecretario de seguridad local y aspirante a suceder al propio Grindetti.

Reclamo de justicia de vecinas y vecinos frente a la comisaría. Foto: Telam.

Maxi, que no los quiere ni un poco, dice al respecto: "La última vez que pisaron el barrio fue hace un mes, en campaña, claro. Después, la nada. Ahora que la mataron, volvieron a pasar los patrulleros. Vamos a ver cuánto duran".

Si ambos tuvieron, al menos, su propia cuota de responsabilidad política en el crimen, de alguna forma había que hacer que se no se note. Y para eso, Kravetz está llamado a ser.

Una operación de baja estatura

"Fuentes de la Municipalidad de Lanús informaron que el joven habría confesado ser una de las dos personas que iban a bordo de la moto desde donde atacaron a Morena". El textual forma parte de una de las primeras informaciones que circularon cuando todo era confusión, a partir del video que registró los hechos, aportado también por la municipalidad, y la fiscalía a cargo de la investigación no había dado todavía con los dos supuestos autores que al día de hoy están presos y acusados por el crimen -y que tienen 25 y 27 años-.

El "menor" en cuestión enseguida fue detenido y su ingreso a la comisaría, esposado, fue transmitido por los canales de televisión. Se lo señalaba como un menor de 14 años. El video de su detención se hizo viral en redes sociales, acompañado de expresiones como la del diputado nacional Ricardo López Murphy: "Hoy el abolicionismo cómplice le costó la vida a Morena de 11 años. La delincuencia y los detractores de la baja de edad de imputabilidad le robaron el futuro a una criatura camino al colegio. Quiero a los ASESINOS PRESOS, tengan la edad que tengan. La única salida es el orden".

Diego Kravetz, responsable del área de seguridad de Lanús.

En defensa del menor, además, intervino Natalia Zaracho, diputada nacional del MTE, también perteneciente al movimiento cartonero. Zaracho se interpuso en defensa del pibe en el momento en que se lo llevaban preso, lo que le valió acusaciones como ésta: "La Diputada Zaracho le debe explicaciones a la familia de Morena. Reprimir el delito y detener delincuentes NO ES UNA VIOLACIÓN DE DERECHOS HUMANOS. Lo que es una violación a los DDHH es que el Estado NO HAGA NADA para garantizar la Vida, la Libertad y los bienes de los ciudadanos. Zaracho debe responder por ser cómplice de un delincuente. Zaracho RESPONSABLE". El texto es de Victoria Villarruel, diputada nacional y compañera de fórmula de Javier Milei.

Pero la mentira tiene patas cortas. A las pocas horas, la fiscal a cargo de la causa, Silvia Bussano, despejó cualquier duda. "No está en la causa que el menor se hace cargo del hecho", aclaró. "Circuló esa versión pero rápidamente fue desestimada", añadió. Ni a Zaracho ni al propio pibe se le pidieron disculpas.

Al pibe en cuestión le dicen "El Polaquito" y ya había sido víctima de una operación similar a manos de Kravetz. Fue en 2017, primero, y en 2019, después. El programa PPT de Canal 13, que conduce Jorge Lanata, lo filmó a rostro descubierto, sin autorización de la familia, y cuando apenas tenía 11 años, donde dijo que había "matado por droga". El ENACOM lo sancionó en 2021 por violar los derechos de la infancia, y lo obligó a realizar un descargo en su programa, pero no accedió.

Los testimonios posteriores pusieron a descubierto la operación. La directora de la escuela adonde concurría el pibe declaró que "el mismo Kravetz le recomendó hacerla con el programa televisivo de Jorge Lanata". La madre, además, denunció que su hijo fue obligado a mentir en la entrevista y "coaccionado por policías de la zona".

El objetivo, antes y ahora, fue instalar la necesidad de la baja de la edad de imputabilidad. Las estadísticas desmienten, sin embargo, que tenga alguna relevancia: según los números de la Procuración General bonaerense, mientras en 2009, la participación de los sub 16 representaban el 4,3 % del total de las causas por delitos graves, en 2021 descendieron al 2,1 %. Residual.

La operación tenía otro objetivo: echar cortinas de humo sobre el hecho de que la ambulancia municipal tardó 40 minutos claves para asistir a Morena luego del ataque.